Llega un momento en el que nuestras adormecidas conciencias resultan incapaces de comprender algunas cosas en toda su extensión. Con eso cuentan algunos para seguir en el machito. En realidad no habría que discurrir mucho para llegar a algunas conclusiones, pero lo cierto es que tal prospección no resulta ser muy común.
El caso es que a mí se me ha dado por pensar que algunos piensan que todos somos desmemoriados, idiotas, ignorantes de todo o, simplemente, desinteresados por lo que nos hacen con lo nuestro.
Antes de seguir con peroratas les diré que todo ésto se me vino a las mientes al leer el episodio ese del alcalde pedáneo/funcionario/militante socialista que parece haber perdido las cautelas (como casi todos) y no se corta un pelo en cartearse electrónicamente con su "clientela".
En fin, hasta aquí lo que parece uno de esos "hechos aislados que en nada empañan la corrección del colectivo".
Pues no. No señor. Aquí, como en multitud de casos (algunos de los cuales figuran relatados, negro sobre blanco, en este humilde dazibao), resulta imposible que dentro de una organización exista un único elemento corrupto. La corrupción, por lo que sabemos, requiere de más de una voluntad y, del mismo modo que no somos capaces de imaginar a la madama de un burdel proclamando su virginidad, no podemos aceptar que no exista implicación de otros situados por encima y por debajo del revelado como presunto corrupto.
Eso es, precisamente, lo que proporciona a la corrupción su fortaleza: todo corrupto tiende a blindarse bajo el manto de la "omertá", el silencio y complicidad exigibles entre los maliciosos para lograr la impunidad. El tributo que todo aparato de corrupción ha aceptado es que, de vez en cuando, debe caer algún eslabón de la cadena. Pero, como alguien le dijo un día al mismísimo Caballero cuando éste anunciaba desde la dirección del partido que la cabeza de Soto olía a pólvora, ¿de verdad crees posible que en una cadena de corrupción pueda existir algún eslabón no corrupto? La verdad es que éste es un supuesto inimaginable.
Pues bien, ¿qué se apuestan ustedes a que, si se lleva a cabo la investigación que anuncian, a lo más que llegará es a señalar a una sola persona? Y, si me apuran, ¿cree alguien que los últimos responsables de cualquier bando ignoran que existe una ya veterana "agencia de colocación" en el Concello, como saben miles de ciudadanos?
En el texto de la información y en las supuestas misivas electrónicas aportadas por la denunciante se habla del partido, del comité de empresa, de sindicatos..., no para acusarlos directamente sino como instrumentos manejables por el denunciado para los ilícitos fines que se suponen. ¿Y diría algo parecido el susodicho si no supiera que cuenta con otras voluntades capaces de soslayar la legalidad para sus particulares fines? ¿Y existe algún otro motor para hacer andar el tinglado que no sea el dinero? Y da igual que sea en billetes de curso legal que en prebendas y/o empleos para allegados.
En suma: para mí que no hay más corrupción que la corrupción generalizada, porque se me antoja imposible que un solo eslabón pueda sobrevivir sin sus compinches de la cadena.
Danos en mobiliario urbano, árbores caídas e semáforos rotos tras a chegada
da borrasca Bert
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6 comentarios:
¡Menuda cadena, colega! ¿qué eslabón(a) se derretirá antes? Uf, tas_pasao (en la imagen).
Querida Raquel:
¿Sabias que que existe algo llamado "escándalo de débiles", que tiene la particularidad de que el responsable es el escandalizado, por escandalizarse?
No me seas ñoña, anda.
O verdadeiramente pornográfico é o asunto que se trata, non a imaxe.
Efectivamente, Remo; pero nunca falta quien mira al dedo cuando éste señala a las estrellas.
Hay manos, con sus dedos incluidos, bien hermosas.
No creo que creáis que me escandalizo, simplemente creo que la foto está traída (nunca mejor empleado) por los pelos.
Nuestra notorias discrepancias, colega Andión, nos ¡permiten! mantener, juntos, durante casi siete años esta ventana. Y que vengas muchos más.
Salud
Que veñan pro que haxa paz!
Ollando esa imaxe o que penso é que, de ves en cando non está nada mal ter pelos na língoa.
Saúdos!!
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