IX ÉPOCA

20.12.08

...que el mundo se acaba

Las cosas están como están, pero ya nos las vamos a arreglar a golpe de coitos o "solitarios", porque está en marcha el "Gran Orgasmo Global", preconizado por unos yanquis iluminados. Será mañana, domingo 21 de diciembre de 2008.
La cosa se presenta así: una página web ha vuelto a convocar a todo dios a que este domingo, a las 13,04 horas (o sea, la una y cuatro minutos de la tarde, una hora menos en Canarias y Portugal), se procure un orgasmo para arreglar los problemas del mundo. ¡Qué bonito! No es broma, porque los impulsores de esta Orgía Global aseguran que, en 2006, el experimento ha tenido mucho éxito, como dicen sin el menor recato en una de las páginas visitadas: "Los impulsores de la idea aseguran que puede contribuir a luchar por la paz, contra el calentamiento global (¿?) y por la justicia social y de género".
El Mega Orgasmo resultante, al parecer, concitará un montón de energía "mental y espiritual" (¡serán capullos!), que se enfrentará a los malos, cual Songoku planetario, hasta que se vuelvan buenos gracias a millones de eyaculaciones simultáneas. Una precaución: yo con condón, yo con koko, como nos recomienda el Gobierno de España, porque no se persiguen los efectos colaterales en plan "baby boom" que resultarían de no ser precavidos. Porque ya somos muchos en el planeta. Lo que pasa es que más que ir contra el calentamiento global, la cosa me parece que contribuirá a lo contrario, digo yo ¿no?
Y se han llenado las bitácoras de posts y comentarios en plan ¡a follar que el mundo se acaba!, con los mejores deseos para esta humanidad que se desliza hacia el abismo a golpe de tiros, de crisis, de corrupciones, de deshumanización y de qué se yo.
Pero el caso es que, navegando por la red no me he encontrado casi ninguna carcajada por el invento. De entrada hay que decir que el hallazgo de hacer coincidir las "buenas vibraciones" y la "energía positiva" para un magnífico fin ya se ha intentado, por los mismos majaras, en 2006 y 2007. ¿Han notado ustedes los efectos", porque yo ni me he enterado, con esto de la crisis financiera, de los cierres de empresas, de las ERE montunas con las que nos hieren, las guerras sempiternas en el Congo, Somalia, Mali, Guinea, Afganistán, Centroamérica, etc.
Pero quienes se ponen contentísimos porque alguien les diga que podemos acabar con las guerras y las crisis a golpe de orgasmos, se olvidan de que el asunto va por otros caminos mucho más difíciles de transitar.
El caso es que, según dicen sus promotores, los padres de la idea cuentan con una especie de ábaco con unas series aleatorias de números, que sufren alteraciones significativas mediante un sistema ignoto cuando hay repuntes de energía en el globo terráqueo, que pueden medirse y todo.
Lo que yo me pregunto es si no sería mucho más efectivo el convocar para esa hora a todos los que andan pegando tiros, sin andarse con disquisiciones relativas a sus preferencias sexuales. Por lo menos, de tener éxito la convocatoria, podríamos tener unos minutos de alto el fuego, porque de otro modo, unos seguirán matando mientras otros podrán considerarse como Ayudantes Técnicos de Placeres Intimos Globalizados (ATPIG) en la tarea de resolverlo todo.
Y, un apunte final, para la mejor comprensión del evento. El día y la hora coinciden con el solsticio de invierno. Igualito que hacían los adoradores del sol hace muchos miles de años, cuando aún no se habían inventado las bombas inteligentes, ni las guerras virtuales, ni la Internet ésta, ni nada de nada.
De todas formas, es un viaje para el que no se necesitan alforjas, porque con 6.300 millones de individuos poblando el planeta (aunque 1.300 sean chinos), difícilmente habrá un día y una hora en que varios millones de pobladores no coincidan en lo de echar un polvo.
Sea como sea, a creyentes o escépticos: felices orgasmos, a las 13,04 (menos mal que es domingo y casi nadie tendrá que salir del "curre" para cumplir, si le dan permiso) o en cualquier otro momento, aunque no sirva para parar una guerra.
¿Recuerdan el chiste aquel que dice que va un tío y pide permiso al jefe porque va a tener un hijo? Pues, cuando volvió al "curre" el jefe le preguntó si había sido niño o niña. Sin rubor alguno, el interpelado respondió: "Aún no lo sé; faltan nueve meses".
Pues eso: ¡Hala! A follar, que el mundo se acaba.
De nada.

3 comentarios:

Anónimo dixo...

Estimado Marcos: esta es la prueba palpable de que "iluminados" los hay en todas partes; ¡tan contentos que estamos con los nuestros! Lo del calentamiento global ha debido afectar al ¿cerebro? de los que han parido tal chorrada.
Sin embargo, no deberiamos tratar el asunto tan a la ligera. Posiblemente, esta sea la única oportunidad que alguno de los 6.300 millones de incautos/as puedan experimentar la "petite morte". De todos modos, es una buena oportunidad para aplicar aquella sentencia de un filósofo cuyo nombre siento no recordar ahora, que decía: "Hay que follar mas y joder menos". Pues eso, manos a la obra.
¡¡Que tropa!!

Anónimo dixo...

Olá!!

Qué lle pasa "Galopín", seica anda vostede imponente ou qué?...
Eu adianteime un chisco a esa hora "D", non creo que o cambio climático se dèse moito conta; é que me fode que me digan cando teño que "follar", ainda que sexa por unha nobre causa.

...Por certo, "follar" dise porque algunhas veces nesa acción faise o efeuto de fol ou folle (Ainda hai moita xente que seguramente nono sabe). O que non sei eu, é como se sentiría a atmosfera con tanta humanidade folleando ao mesmo tempo...

Saudíños!

Anónimo dixo...

El VB podria organizar una quedada para celebrar las 1000 entradas como las 1000 primaveras de la lengua gallega, de paso tomarnos y conocernos mejor.
Tambien puede ser que aparezca la honorable anciana y jubilada que ultimamente está muy calladita en su casa.
Un fuerte abrazo y feliz navidad