IX ÉPOCA

28.9.10

¿Huelga la huelga?

Pues, la verdad es que no sé. Pero sí sé lo que es una huelga, lo que significa el derecho constitucional a convocarla y secundarla, lo que significa el derecho constitucional al trabajo y cuales son los "piquetes coactivos" reales, ilegales y anticonstitucionales.
Me preguntaba ayer una funcionaria qué debería hacer: ir o no a la huelga. Mi respuesta fue que, como funcionaria y, por lo tanto, sin peligro para su puesto de trabajo por secundar el paro, su obligación era ir a la huelga en nombre de aquellos que, estando de acuerdo, no podrán ejercer su derecho constitucional por culpa del "piquete coactivo" de la patronal.
¿Estás de acuerdo con los motivos aducidos por los convocantes? Pues haz huelga, si puedes, con independencia de considerar si la "movida" favorece o dificulta a tal o cual partido. Ya sé que nos encontramos ante el mundo al revés de Alicia, pero también sé que las cosas vienen dadas como vienen; que tenérselas tiesas con un gobierno que estuvo tratando de no ir por el camino que ahora le imponen el tiempo que pudo resulta difícil de asimilar; que esto puede debilitar al presidente más de izquierdas que hemos tenido hasta ahora (más o menos de "izquierdas", si se quiere), y que parece un contrasentido que un instrumento de la izquierda se esgrima ante si misma.

Y ahora, lo de los piquetes:

La huelga es un derecho constitucional. Que yo sepa, no hay derecho que pueda ejercerse sin el respaldo de la coacción. Las leyes están respaldadas por eso que denominamos las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, porque de otro modo no habría forma de aplicarlas. Pero por lo visto hay derechos que no tienen que ser respaldados por ningún instrumento coactivo. ¿Se imagina alguien a un destacamento de policía recriminando a un patrono que amenace a sus empleados con represalias si hacen huelga?
Pues bien, los piquetes, o son coactivos o no son piquetes ni farrapos gaitas. El eufemismo de "piquetes informativos" es una estupidez, por mucho que lo soporten tinglados legales (que no legítimos). Y el derecho constitucional al trabajo no ampara la decisión de ir al tajo, sino que declara que todo ser humano ha de ver satisfecha su necesidad de disponer de una ocupación remunerada. Con él se corresponde la obligación de aplicarse en las tareas por las que se cobra, lo que nada tiene que ver con el derecho a dejar de trabajar si hay huelga legalmente convocada.
La ley prohibe los piquetes coactivos, pero no considera piquete a la acción intimidatoria de la patronal, que no se corta un pelo (hay excepciones, claro) en dejar claro que secundar una huelga tendrá nefastas consecuencias para quien ejerza su derecho. Y qué decir, ya, de los gobiernos autonómicos que se atrincheran en su capacidad para reventar el ejercicio de aquel derecho impidiendo el acuerdo sobre servicios mínimos. ¡Esos sí que son piquetes coactivos!
Pero, claro, es que las leyes son impulsadas por quienes se ven más como posibles perjudicados por la existencia del derecho a reclamar que por quienes reclaman. Los reclamantes no suelen formar parte de los entramados del poder, por mucho que los sindicatos anden pretendiendo formar parte del ya existente. Peor sería que no los hubiese, aunque aquí les hemos repartido "caña" cuando creímos que no es por ahí por donde debería transitarse.
En suma: la huelga es un derecho legal; los piquetes de huelguistas, por definición, han de ser coactivos (como la Guardia Civil); los piquetes patronales son, además de ilegales, perniciosos.
O sea que, si estás de acuerdo con los fines proclamados, haz huelga si puedes; denuncia a quien trate de impedir el ejercicio de tu derecho constitucional; trata de ir al tajo si no estás de acuerdo, y, en todo caso, no seas tan borde de pedir ayuda para pasar un piquete si te lo encuentras a la entrada.

2 comentarios:

havi dixo...

máis claro auga. por fin un comentario clariño clariño... que estaba parecendo que a crise viña motivada polos sindicatos... ai! tanta manipulación polos medios de comunicación (cheiran moi mal) e cánto borreguismo (e comodidade).
Podemos cambiar as cousas, claro que podemos; pero HAI QUE MOVILIZARSE.
Deixémonos de decir que chove cando mexan por nós!!

Anónimo dixo...

Y pq no nos movilizamos hace un año??? Y si lo hacemos ahora que casi no hay posibilidades de maniobra???
Los sindicatos hay que renovarlos. Estan obsoletos. Renacer o morir.