IX ÉPOCA

8.9.08

"Parajodas"

Me gustaría que alguien me explicara qué sentido real tienen dos noticias, en apariencia paradójicas, que hemos podido leer en los últimos días. La primera se refiere a que los brutales ciclones que asolan reiteradamente las tierras del Caribe no matan en Cuba y producen centenares de muertos en las otras islas y en los EE.UU.; la segunda es que el sacrosanto "mercado libre" se ha puesto a dar saltos de júbilo porque el neoliberal gobierno de los EE.UU. le ha regalado 100.000 millones de dólares a las dos empresas hipotecarias más importantes de aquel país para que su caída no se llevase por delante la economía estadounidense.
Con respecto a la primera, la cosa está perfectamente explicada porque los cubanos, víctimas de una tiranía insufrible, son obligados a evacuar sus domicilios por las implacables autoridades que no quieren que se muera la gente y cuentan con un sistema realmente eficaz de prevención y alerta de huracanes. Entre tanto, al norte, el paraíso de la libertad y los derechos humanos no considera atendibles las necesidades de los seres humanos residentes en Cuba, porque esa tiranía no es "su tiranía" y los derechos humanos sólo es lícito despreciarlos en la base de Guantánamo, faltaría más.
Pero la segunda sí que es estupefaciente. Resulta que el templo del liberalismo económico, en el que los ciudadanos tienden a considerar que el Estado es un enemigo de sus libertades individuales y sus empresas agitan el fantasma de la intervención como la principal amenaza para la libertad de iniciativa empresarial, cuando las cosas vienen mal dadas por culpa de la "libertad" de rapiña que permite a las empresas y a sus dirigentes enriquecerse a costa de la población más desfavorecida, claman porque el Estado acuda en su auxilio.
La falacia neoliberal de que el mercado cuenta con los mecanismos necesarios de redistribución de la riqueza y que no hace falta tutela alguna del Estado se derrumba con cada ciclo de la economía. Ese principio "liberal" viene diciendo que hay que dejar que algunos se enriquezcan sin intervención estatal, pero que los poderes públicos han de usar el dinero de los impuestos de todos para impedir que quienes han actuado como auténticos depredadores pierdan lo exageradamente conseguido cuando la economía se resiente por su mala gestión y su voracidad desmesurada.
Por las noticias de los periódicos sabemos que las hipotecas "sub prime" están en los cimientos de la actual crisis económica. Las bolsas (que son los templos de los adoradores del becerro de oro actual) se desploman, miles de pequeños ahorradores se quedan con dos palmos de narices viendo como se esfuma su dinero, y los índices sufren caídas que parecen imparables, sin que la libertad de iniciativa empresarial sepa como frenarlas.
El caso es que quienes defienden que el Estado nada tiene que hacer en el desarrollo de la riqueza de las empresas, como no sea facilitarlo a costa del resto de los contribuyentes, se ponen a dar saltos de júbilo cuando el Estado interviene para frenar el desplome de esas empresas que no querían saber nada de él unos meses antes. Entonces, las bolsas se recuperan; se mejoran las perspectivas de creación de un empleo que, aprovechando la crisis, se iba destruyendo para "mejorar" las cuentas de resultados de las empresas afectadas por la crisis, y los "Ibex", "Nikei" y "Down Jones" levantan cabeza orgullosos.
Mientras tanto, unos fenómenos naturales, nada relacionados con el liberalismo económico (¿o si?), matan gente en paraísos de economía de mercado como Florida, Jamaica, República Dominicana o Haití, pero no en Cuba, donde no existe el mercado libre y la economía está completamente intervenida por el Estado, excepto en ese oasis de la libertad que se llama Guantánamo, paradigma de que la granja de Orwell, en la que "todos los animales son iguales aunque unos son más iguales que otros", puede encontrarse en cualquier parte.
Son "parajodas" (esto, paradojas) de este mundo traidor en el que nada es verdad ni es mentira, sino que todo es del color del cristal con que se mira.
O sea, que "asegún".

4 comentarios:

Anónimo dixo...

Si, "parajodas" está la cosa, Sr. Andión y pide ud. que alguien le explique de qué va esto. Pues visto lo visto, o sea, los miles de paginas de diarios de todo el mundo, una cosa si está clara, y es que debe ser uno de los primeros mandamientos del capitalismo: privatizar las ganancias y socializar las pérdidas, que es lo que ha sucedido en este caso. Además, según se leía en algun diario económico, también ha sido la presión de los grandes fondos de inversión internacionales y el gobierno chino, que ha comprado ingentes cantidades de deuda americana, y que veían peligrar su economía. Así que "no problem", el tío Sam Bush al rescate. Así, tirando con pólvora del rey, los accionistas de esas dos entidades toman mas riesgos de lo debido, sabiendo que si sale bien, se forran, pero si algo falla, el gobierno acudirá al rescate, como así ha sido. Nada nuevo bajo el sol. Por cierto, poco se habla en las informaciones de la banca japonesa. ¿serán más listos?
En cuanto a lo de Cuba, poco que añadir a lo ya expuesto por ud. De verguenza ajena son las declaraciones de "Condy" Rice hablando de derechos humanos en Cuba, después de visitar a Gadafi, y del "marrón" que tienen en Guantánamo.
Tiene un morro que se lo pisa ¡Vaya tropa!!

Anónimo dixo...

Brillante.
Nuevamente don Marcos, como de costumbre durante casi el año que conozco Vigoblog; me tiene cautivado con su conocimiento de detalles específicos sobre el comportamiento del genero humano. A tal grado me abstraje en sus explicaciones que todo un día transcurrió sin que yo notara el paso del tiempo. Incluso se me olvidó almorzar.
Será que los colores del otoño aportan a tu paleta de pintor más colorido ideologico.
De verdad creo que tienes buena mano para cazar.
A lo mejor estarás dispuesto a cambiar tu forma de vida para volverte cazador.
No cualquiera hallaría sus sitios y sus colores al mismo tiempo.
Es una satisfación contar contigo.
Un fuerte abrazo.

OS PEIXES A ARDER.

celebrador dixo...

Me encanta ese anónimo de la lengua castellana. Mi profa de literatura nos contaba que, probablemente, fue una rima que algún galán escribió en el abanico de alguna dama en los románticos salones de la época isabelina

Marcos Andión dixo...

Ciberquerido "Amigoplantas". Si al anónimo al que te refieres es el del "mundo traidor", siento contradecir a tu "profa de literatura", porque no procede de ningún anónimo, sino de un poemilla, "Humoradas", de don Ramón de Campoamor. Para ilustrarlo, te lo reproduzco:

"Busqué la ciencia, y me enseño el vacío.
Logré el amor, y conquisté el hastío.
¡Quién de su pecho desterrar pudiera,
la duda, nuestra eterna compañera!.
¿Qué es preciso tener en la existencia?
Fuerza en el alma y paz en la conciencia.
No tengáis duda alguna:
felicidad suprema no hay ninguna.
Aunque tú por modestia no lo creas,
las flores en tu sien parecen feas.
Te pintaré en un cantar
la rueda de la existencia:
Pecar, hacer penitencia
y, luego, vuelta a empezar.
En este mundo traidor,
nada es verdad, ni mentira,
Todo es según el color
del cristal con que se mira".

Encantado de tenerte por aquí, después de vernos en "Un barco más grande". A ver si me doy una vuelta por tus blogs; nobleza obliga.