IX ÉPOCA

7.2.07

Amo a Viiigooo

Todo parece indicar que los equipos de asesoramiento electoral de los diferentes partidos (que van todos por el libro y acaban por hacer siempre lo mismo, aunque van cambiando de lo mismo cada vez) han agotado la vía "burro grande, ande o no ande", tras comprobar lo difícil que lo había puesto Manolo Pérez con lo de la "Corina (estooo..., Colina, en qué estaría yo pensando) Encantada". Volvieron a intentarlo C.Porro y Toba con lo del PXOM de los ¡400.000 habitantes para hoy! (como si fuera el cupón de la ONCE), y enseguida le saltó AR Caballero a la yugular con lo de la Mega Noria y el Hiper Mirador en otro rellenito "de fortuna", pero parece que la cosa no va.
Y los equipos de asesoramiento de la cosa, vuelta a empezar, que hay que cobrar a fin de mes y algo se les tiene que ocurrir. Y se les ocurrió.
Estoy convencido de que optaron por regresar a los orígenes y, como dice en el introito del manual, debieron considerar que lo que ha funcionado, funciona. Puestos a la faena, decidieron apelar a lo más primario del electorado: el contingente afectivo.
Supongo que la idea tuvo un origen personal, porque no creo que se les haya ocurrido a todos de repente y al mismo tiempo, y alguien recordó el éxito que, gracias al ciberespacio, obtuvo aquello de "Amo a Lauuura...". "¡Eureka!", estoy seguro que dijo enfervorizado. Y "reportó" el hallazgo a la Ejecutiva de Campaña:
-Ya lo tenemos. Hay que destacarse en la entrega a la ciudad y a la ciudadanía.
-Pero si es lo que hemos hecho siempre...

-Ya, ya. Pero se trata de publicitarlo; de hacer que vuestra propuesta sea imaginativa y no vuelva a la sempiterna fórmula competitiva de prometer el oro y el moro, y de decírselo a todo el mundo.

-Hombre, visto de ese modo...

-Pues, claro. La gente ya está cansada de tanto ¡programa!, ¡programa!, ¡programa! Eso pertenece al pasado, y ya no mueve a nadie, que los ciudadanos no son tontos.

-¿?

-O sea que..., a lo que íbamos. Como podéis ver en el informe adjunto, pág. dos, aptdos. seis, siete y siguientes, el objetivo es Vigo con todo lo que contiene, incluidos/as jubilados/as, niños/as, transeuntes y militares con/sin graduación, y el instrumento de convicción es, ¡cómo no!, el AMOR.

-¿?..., ¡Hostiña!

-Efectivamente, el AMOR, así, con mayúsculas. Y ¿que mayor amor puede tener aquel que desee servir a Vigo que el mismísimo Vigo? Pues ya está; ¡hay que amar a Vigo sobre todas las cosas y al electorado como a si mismo! El candidato ha de convencer a las mismísimas piedras de que su amor por la ciudad está por encima de todas las cosas. Ahora, sólo nos queda perfilar la frase central de la campaña, que resuma contundentemente la idea propuesta...

Como por ensalmo, toda la Ejecutiva de Campaña, puesta en pie y cimbreando las cinturas:
¡¡¡Amo a Viiigooo,/
(pero esperaré a las elecciooones...)!!!

4 comentarios:

Marcos Andión dixo...

Perdón. Olvidé dar cuenta de que al equipo de asesoramiento electoral le han prorrogado el contrato, tras recibir efusivas felicitaciones de la ejecutiva del Comité de Campaña. Permanezcan atentos a sus pantallas, que esto no ha hecho más que empezar.

Anónimo dixo...

"Levo reflexionado bastante sobre esta cidade á que tanto quero"

"Vigo é o suficientemente importante para que a tomemos en serio"

Da infumable web de Santi Domínguez cuxo equipo de asesoramento electoral debe estar formado polos seus piores enemigos.

Anónimo dixo...

Hay amores que matan....

Anónimo dixo...

Pues si se trata de amar a VIGO me apunto.
Hay amores que se sufren pero se gozan.
!QUINTA PROVINCIA XA¡