Esta panorámica tomada desde la fachada del convento de San Francisco en la rua Santa Marta, a buena altura sobre el nivel del mar —¡sin agacharme!— muestra la entrada a un polígono industrial creado en el puerto pesquero, delante del barrio marinero del Berbés, y detrás del cual hay una preciosa ría ¡se lo juro caballero! Detrás de todas esas naves industriales hay una bahía espléndida a la que la ciudad de Vigo ya muy malamente logra asomarse. No se preocupen, es una situación transitoria, pronto instalarán una noria al lado del edificio de la Xunta, en Montero Ríos, y entonces...
ya no habrá problema para disfrutar de una amplia vista sobre la bella bahía que ahora queda justo ahí detrás de todas esas naves industriales.
Desde Camelias -¡sin agacharme!- tenemos este trozo de ría a la vista y desde el Castro, entre árboles, podemos disfrutar de los centímetros de mar que muestra la fotografía.
Vigo sí tiene mar, difícil de verlo, pero sí que lo tiene.
Antes iba mucho a pasear al Castro para contemplar sus maravillosas vistas. Ahora apenas se ve nada, han plantado árboles que alcanzan gran altura justo en el lugar más inoportuno. Lo de siempre: los jardines hay que hacerlos pensando también en el futuro. Si se quieren respetar las vistas entonces habrá que plantar allí vegetación de tipo arbustivo.Es de cajón ¿quienes deciden los jardines del concello?
ResponderEliminarJe je! Hace unos días estuvieron en Vigo unos amigos mios de visita. Tuvimos que bajar hasta el puerto deportivo para ver agua...
ResponderEliminarA lo mejor es lo que buscan, que nos olvidemos de las vistas en esta ciudad. No se entiende que pretendan solamente poner más y más obstáculos entre nosotros y el mar
ResponderEliminarUna ciudad con tantas cuestas ¡y bien empinadas! ha conseguido que no se vea el mar.
ResponderEliminar¡Menudo tesón el de sus 'fuerzas vivas'! (Te son, ellos, muy vivales).
Desde la farola de Urzáiz se ve el mar. Inigualable vista, con palmeras jalonando el camino.
ResponderEliminarEn todo este recorrido por los impedimentos para ver el mar, se olvida uno de los almacenes que están detrás del edificio de la Xunta, del Bahía y de toda la fila de casas que dan a Cánovas del Castillo, que fueron construidas sobre lo que antes era mar. Cargar sobre Casa M.A.R. o sobre el centro comercial está bien, pero no hay que olvidar que desde principios de siglo se ha intentado ganar terrenos al mar. ¿Qué sería de la Plaza de Compostela?
Pues hala como aquellos lo hicieron ya tenemos disculpa para hacer más y más rellenos....es absurdo querido amigo... Razona un poco y me darás la razón.
ResponderEliminarLas palmeritas de Colón ¿no estarían mejor en Benidorm? Son horrorosas como las de Sanxenxo, Portonovo, Pontevedra.... No tienen nada que ver con lo nuestro ¿Por qué tienen esa manía de vulgarizarlo todo además de encarecerlo?
Pero ¿cómo se puede decir que una palmera, la quintaesencia del pazo y de la casa de indianos, no es característica de Galicia? ¿O es que sólo el eucalipto, plantado aquí hace unos cuatrocientos años, es autóctono? Y los castaños de Indias, ¿de dónde son? ¿Y los camelios y naranjos?
ResponderEliminar¿Qué es lo nuestro?
O problema da palmeira non é que sexa autóctona ou non, que tanto ten, senon que é unha árbore que polo seu porte e forma é puramente decorativa, e non cumpre as funcións que cómpren na cidade: protección contra a insolación no verán, reducción do ruido e da contaminación atmosférica... ademais de ser desproporcionadamente cara nunha urbanización que -por aforrar- non cambiou o saneamento destas rúas.
ResponderEliminarCon respecto ao dos catrocentos anos do eucalipto :-)))), repasa os apuntes ;-)
Las palmeras típicas de pazos y casonas de indianos son las Phoenis canariensis, no las Trachycarpus excelsus que decoran la calle Colón
ResponderEliminaro noso son os carballos, as sobreiras.....
ResponderEliminarLo del edificio al lado de San Francisco tiene bemoles....
ResponderEliminarAdemáis os pazos e casonas teñen unha ou duas, non un palmeiral
ResponderEliminarAs da rua Colón penso que poden ser Chamaerops humilis
ResponderEliminarE os castiñeiros truxéronlos os romanos fai unhos 2000 anos, xa podémolos considerar da terra
ResponderEliminarYa se ha dicho varias veces en este blog, los árboles apropiados para la ciudad son de hoja caduca pues dan sombra en verano y permiten más luz en invierno.
ResponderEliminarPero lo cierto es que desde el monte del Castro ya no puede contemplarse casi toda la ría, ni mucho menos. Habría que talar u ordenar esos árboles de alguna otra manera.
Ostias, tanta gente por ahí sabiendo tantas cosas y la Corina con una pandilla de desaprensivos, incompetentes y otras cosas peores. Vivir en Vigo ya no es lo que era en la época de los romanos.
ResponderEliminarDe todas maneras, lusen lindas las palmeritas.
Y al de los arcolitos de 400 años: fray Rosendo Salvado los trajo hace 150 años de Australia. Son muy buenos para el catarro.
O verdadeiramente noso é o Carballo 1, 2 e 3. Eso sí que é vigués.
¡Ay! aquellas empanadillas.... ¡Ni las de Encalna!
ResponderEliminarDe acuerdo con lo de los árboles de hoja caduca, ofrecen lo mejor en cada estación y además las hojas no almacenan tantísima contaminación...
ResponderEliminarDesde el Castro es donde mejor se aprecia el tamaño de los rellenos... ¿Ojos que no ven corazón que no siente?
ResponderEliminarLos miradores del Castro ¿qué ha sido de ellos?
ResponderEliminarAbsurdo lo del Castro, si señor
ResponderEliminarSería bueno que los del concello de Vigo leyesen los puntos en los que se basa el plan de Bilbao.
ResponderEliminarAllí la panificadora pasaría a ser protagonista....
Y otra protagonista sería la descontaminación de la ría. ¡¡Y allí son más habitantes!!
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